sábado, 8 de diciembre de 2012

Cross Nacional de Cantimpalos


Cantimpalos fue mi primera competición a nivel federativo, de esto hace más de 8 años. Quedé encantado del circuito. Y eso, que viendo el recorrido no tiene ningún atractivo, ni tan siquiera algún que otro árbol. Eso sí, al fondo se encuentra la sierra de Guadarrama con sus cumbres nevadas como invitado.

El circuito es de aproximadamente 2650 metros en su totalidad de hierba. Consiste en dar cuatro vueltas, donde la mayor dificultad es superar unos badenes. Lo malo es que suele haber bastante viento, que lo endurece bastante. Estos badenes van haciendo mella, y en la dos últimas vueltas ya no hace mucha gracia tener que pasar por ellos.

La mañana fue muy gélida, el calentamiento no fue muy adecuado, cuando me quise dar cuenta ya quedaba muy poco para pasar por cámara de llamadas. Que sensación volver a ponerme mis zapas de clavos para cross, la verdad es que no recuerdo cuando fue la última vez. Como siempre, la salida es muy rápida, a pesar de ser consciente de ello, no ceso en mi empeño de adelantar posiciones. La idea era seguir tras la estela de Luismi todo el tiempo que pudiese, parece que los compis del Club, Carlos y Víctor, pensaron lo mismo que yo, íbamos todos en el mismo grupo. Obviamente no dura mucho porque el ritmo de Luismi es alto. El primero en ceder soy yo, ya que noto las piernas muy cansadas, aflojé el ritmo. Encima empezaron a aparecer pensamientos negativos. Me empiezan a pasar varios corredores, por lo que las expectativas son pésimas, para colmo todavía faltan tres vueltas.

Establezco un ritmo de crucero, que parece que se sitúa un poco por debajo de 3.40. La segunda vuelta sigo inmerso en pensamientos negativos, que no ayudaban a mejorar posiciones, me faltan buenos entrenamientos y resultados positivos para que esto no ocurra. Pero al finalizar la segunda vuelta me doy cuenta que Carlos y Víctor no me sacan más de 20’’, y que acercarme a ellos adelantaría bastantes posiciones. Sin perder los papeles, intento al menos que no decrezca el ritmo que estaba llevando, que a estas alturas de la prueba el viento y los kilómetros habían consumido bastantes energías. Poco a poco voy recortando distancia, que al paso por la tercera vuelta es menos de 5’’, gracias a este intento de caza, un grupo de unos 3 corredores no termina de cogerme, que también hay que salvaguardar las espaldas.
En el ecuador de la prueba
En la última vuelta incremento el ritmo para alcanzar a Carlos, que se había quedado en la vuelta anterior del grupo de Víctor, que iba en compañía de otro corredor. A estos dos corredores no los consigo reducir distancia, creo que íbamos al mismo ritmo. De hecho creo que la falta de confianza no me hubiese aparecido tan pronto hubiese sido un buen grupo para ir toda la carrera juntos. A Carlos le doy caza en la zona de bajada muy tendida del circuito. La estrategia era mantener el ritmo con aceleraciones en las zonas que no daba el viento de cara, que tras tantas vueltas ya las sabía de memoria. No resulta fácil hacer hueco con Carlos, que intenta por todos los medios no quedarse atrás. En la zona de badenes, me pasa un corredor que va a un ritmo muy alto, y ni se me pasa por la cabeza ir tras él, vaya velocidades que se gasta a estas alturas de la prueba. En la última subida a falta de unos 300 metros es muy último cambio fuerte hasta la línea de meta, donde casi alcanzo al corredor que me había adelantado, no me había fijado que iba cerca porque en esta vuelta comencé a doblar corredores y era difícil de seguir la estela.

Al final entré en meta en la posición 49º con un tiempo oficial de 38’04’’, el tiempo de las cuatro vueltas fueron: 8.59-9.36-9.37-9.47 (incluye unos 150 metros más).

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