Sin darme cuenta mi objetivo principal del otoño había llegado, el campeonato de España de Mushing Tierra, que este año se celebraba en la localidad de gallega de A Estrada. Sin preparar estrategias y sin pensar en los entrenamientos para dicho campeonato, llegó sin casi avisar. El tiempo no espera, por lo que hasta allí nos desplazamos para poder defender la medalla de bronce conseguida la temporada pasada. Desde septiembre solo preocupado por recuperar esa rodilla – tibia maltrecha. Por cierto, esa misma semana me habían entregado los resultados de la Resonancia Magnética donde el informe indicaba que tenía una fracturar por estress en la meseta tibial. A pesar de este contratiempo, nada hizo cambiar mis planes. El campeonato de España se presenta interesante; ya que no habían preparado dos circuitos donde se podía correr muy deprisa. La primera manga era de 2500 metros, donde la mayor dificultad era una cuesta larga y tendida, lo mejor es que el último 1500 era muy favorable e ideal para mis características. La segunda manga era un 5000, algo más duro, pero se preveía que se iba a volar. La meteorología fue respetuosa, aunque el primer día nos tocaba la salida individual pasadas las 12 de la mañana, hacía unos 10ºC con algo de nubes. Lo bueno es que al ser tan poca distancia Nua no iba a notar esa temperatura. En cambio la segunda manga salíamos en masa a las 10.49, las temperaturas bajaron, por lo que tampoco hubo problemas. Todo perfecto. Añadir que el circuito me pareció ideal para la práctica de este este deporte, y como no, precioso. La mayoría de gente estaba de acuerdo conmigo. A ACADE le salió todo a la perfección.
En la primera manga la salida era individual, con intervalo entre equipos de 30’’. Este tipo de salidas le da un plus de emoción a la competición, ya que vas compitiendo sin referencias. Ni siquiera sabes si lo estás haciendo bien, porque no ves a los rivales. Me limité a correr a todo trapo. Es un hándicap, ya que al no tener referencias se rinde a un nivel inferior, pero es otro modo de competir, y hay que estar preparado para todo. Salía detrás de mí compi de club David – Arena, teníamos nuestras dudas de si podría hacer algunos metros. Y no pudo, tras una salida caótica se tuvo que esperar los 30 segundos hasta que saliésemos nosotros. Estuvimos volando juntos unos 700 metros. Me costó unos metros imprimir toda la velocidad que quería, pero desde la lesión eso me cuesta porque me falta confianza en esa pierna, poco a poco la iré a adquiriendo. Tras la subida giramos para hacer una bajada fuerte y adentrarnos en un tramo de hierba q iba a dar a un puente, empezamos a ver al corredor que había salido 1’ antes, tan pronto. Aquí ya vamos a todo gas con Nua empleándose como nunca. Y tras pasar el puente lo adelantamos, nos damos ánimos. Yo sigo con fuerza queda poco y no tengo que perder mucho tiempo. Lo últimos 600 metros se podía ir muy deprisa, el circuito discurría paralelo al Río Liñares, Nua se exprimía todo lo que podía y yo no iba a ser menos. Íbamos a todo gas, terminé contento porque lo dimos todo y el objetivo se cumplió que era correr en torno a 2.55, mi sorpresa fue que me salió mucho más rápido. Tiempo final de esta manga 6’52’’, me situaba en 6ª posición, pero a tan solo 3’’ de la medalla de bronce, estábamos en un pañuelo. La carrera del día siguiente se presentaba muy interesante. Pero lo más importante es que no me ocurrió nada de nada, es decir, corrí todo lo deprisa que podía, disfruté al máximo de la prueba, me encantó.
Ahora quedaba toda una tarde pensando en todas las posibilidades. En realidad me sorprendió mi rendimiento. Lo que tenía claro es que tenía que aguantar en el grupo de cabeza el máximo tiempo posible, para que se fueran eliminando rivales. Y lo que sabía es que se iba a ir muy deprisa, en torno a 3’/km. Viendo los resultados de la primera manga; estaba convencido que si aguantaba estaríamos en la lucha Pedro Etxeberría, Mikel Etxeberría y Óscar – Tella. Los hermanos estaban en un buen momento de forma y sus perros han evolucionado favorablemente. Óscar – Tella, lo tenían muy fácil, pero la duda era su perra, que está en proceso de mejora, dentro de unos meses serán imparables. Analizando la clasificación había una igualdad increíble, ya que había 8 corredores por debajo de los 7’, es decir que estaban a menos de 11’’ del bronce. Así que la segunda manga prometía.
Llegaba la hora de la segunda manga, estaba preparado. Tras un buen calentamiento, en donde me había dado tiempo a visualizar la carrera. A mi garmin se le rompió la correa, por lo que decidí salir sin reloj, para correr a tope sin preocupaciones externas. La salida era en masa, me tocaba salir en la primera fila de la salida. Aunque sabía que se me iban a ir un pelín, pero remontaría. Estoy lentorro. Espectacular salida, nadie quería perder la estela,se notaba la tensión. Aquí os dejo un vídeo de la salida:
Vamos a todo tren, estoy inmerso dentro del grupo, pero me lo tomo con calma. Esto es más largo, hay que tener cautela. Esto podía llevarme a dejarme fuera de carrera. Giramos a la izquierda, empieza un tramo más duro. Adelanto una posición y llega la compañía de un border Collie, que se le ha escapado a un corredor. Se arma un poco de caos por este tema, pero no nos benefició a ninguno. Tras terminar la subida, nos adentramos en un tramo con vegetación muy frondosa, salimos a pista ancha, donde parecía que se iba Óscar – Tella, seguidos muy de cerca por Pedro y Mikel. En este punto acelero el ritmo, Nua lo pide; como siempre ella no falla va muy concentrada. El perro suelto se centra en Pedro y Mikel. Noto que llevo un grupo, acelero hasta los primeros puestos, en menos de 500 metros contacto con ellos. El perro nos va frenando a unos y a otros, a Nua, por ejemplo, intentamos pasar dos veces, pero como vino a frenarnos Nua decidió no pasar más. A pesar de este contratiempo la velocidad es muy alta. El grupo se va reduciendo, lo noto. No miro para atrás, voy muy concentrado en los movimientos de los que llevo por delante. La clave está en la bajada larga de mucha pendiente. Vamos todos en pañuelo, nadie se escapa todo esta igualado. Llego a la altura de donde está Laurix, creo que los dos pensamos lo mismo en ese punto. Aquí añado una reflexión, el viernes ella me dijo que no optaba a medallas, que estaba mal de forma. Ella sabe decirme justo lo que necesito a cada momento, con ese comentario mi motivación fue mayor. En este punto, mientras ella nos hacía fotos, ella pensó: “sabía que estarías en este grupo”. Yo pensé: “¿has visto dónde estoy?” Al poco, antes de llegar a la bajada, el perro fue cogido por su dueño, con lo que todos respiramos, creo que en este punto aceleremos el ritmo. Debíamos estar en torno al kilóemetro 3.5 o así. Enfilamos un tramo de asfalto que nos llevaba hacía la bajada. Nua acelera, acelero. Óscar – Tella también lo hacen junto a nosotros. Noto a Pedro y a Mikel juntos, creo que ya es solo cosa de cuatro. Aquí ya vamos con todo sin concesiones. Llagamos al tramo del puente, en donde Tella empieza a flaquear. Pedro y Mikel nos cogen unos metros en ese tramo. Es donde peor lo paso, pero en esos 200-300 metros, se van. Falta menos de kilómetro, aprieto los dientes y animo a Óscar – Tella. Intento irme hacía los de delante, pero vamos tan rápido que las piernas no me dan mucho. A falta de 300 metros miro hacía atrás (la única vez), veo a Rodrigo, que viene cerca, por lo que acelero todo lo que puedo, aunque en realidad debí mantener la velocidad como mucho. Al final en meta soy 3º, a 10’’ de Pedro y a 9’’ de Mikel, que es el nuevo campeón de España en categoría Senior. He marcado un tiempo de 15’07’’, increíble el ritmo. Alucino. He disfrutado porque cumplí mis objetivos personales, lo que no esperaba era estar tan cerca de las medallas, pero al final fuí 4º.
De este campeonato me quedo con varios detalles, que para mí son muy importantes:
1. Óscar – Tella, perdieron su medalla de oro porque Tella se despistó varias veces en el tramo final de la prueba, pero lo destacable es que Óscar en ningún momento tiró de la perra, la esperaba y animaba para que ella echara a correr, simplemente admirable.
2. Rodrigo, que solicitó subir a la categoría senior. Nadie ha hablado de él, pero con 16 años se ha metido 5º en un campeonato de España muy duro, en donde se ha corrido de lo lindo. Enhorabuena!
3. Nua, es una perra sencillamente excepcional que viniendo de protectora y a pesar de que algunos dicen que es muy pequeña; para mí es la mejor. Trabaja de forma incansable. Me llevó en volandas para poder luchar por las medallas. Se merece que me esfuerce al máximo para ayudarla en su empeño.
Y por último, el fin de semana magnífico con los chic@s de CrossMadrid en una casa rural que cogimos a menos de 5 kilómetros del circuito. Donde degustamos platos veganos de alta gama y no paramos de reírnos a lo grande. Espero que pronto nos volvamos a juntar para pasarlo como este fin de semana, haciendo lo que más nos gusta.
En este enlace podéis ver los RESULTADOS del Campeonato de España de Mushing Tierra.
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